Mis hermanos y yo llevamos como cinco años intentando vender la casa de mis padres, pero no lo hemos conseguido. Supongo que es normal, estamos en una etapa económicamente triste del país y las casas no se venden con demasiada facilidad. Lo que sí está empezando a proliferar, eso sí, es el alquiler; supongo que porque la gente no tiene que desembolsar tanto dinero de entrada. No habíamos querido aceptarlo hasta ahora, pero va siendo hora de hacerlo: esa casa no va a venderse. O quizá sí, pero no se venderá con tanta facilidad. Visto lo visto, lo mejor que podemos hacer es alquilarla.

Una vez tomada la decisión, todos nos hemos dado cuenta de que nos espera un trabajo muy arduo en lo que respecta a poner la casa a punto para ser habitable. Hay reformas que hacer y muchas cosas técnicas y burocráticas que tenemos que tener en cuenta. De la parte de reformas se encargarán dos de mis hermanas, a mi otro hermano le toca administrar y controlar los gastos que se vayan haciendo y yo, por mi parte, me voy a encargar de la parte técnica y jurídica. Y la primera cosa de la que debo procurar informarme bien es del asunto de la ITE en Barcelona.

ITE son las siglas de “Inspección Técnica de Edificios” y designa al sistema de control de viviendas que, periódicamente, deben llevar a cabo los propietarios de una casa; es decir, para saber, en todo momento, si la casa en cuestión está habitable. Todavía desconozco el precio de ITE, pero será una de las primeras cosas que intentaré averiguar. Por otra parte, hay que dar de alta la electricidad, y lo mejor será que, para entonces, procure hacerme con un certificado de eficiencia energética. Ya lo ven, son muchas las cosas que hay que tener en cuenta. Despacito y con buena letra.